RASTOKE, EL PEQUEÑO PLITVICE

Rastoke es un bonito pueblo situado a unos 30 kilómetros al norte del Parque nacional de Plitvička jezera, en la confluencia de los ríos Korana y su afluente Slunjčica.

Rastoke

Esta localidad es conocida popularmente como el pequeño Plitvice, debido a las cascadas, saltos de agua y pequeños lagos que forman estos dos ríos en sus alrededores e incluso en su casco urbano. Es, además, el centro histórico de la ciudad de Slunj.

Rastoke es también conocido por sus molinos de agua, que en el pasado eran utilizados para moler trigo, maíz, centeno, mijo, cebada y avena.
En la época de mayor esplendor del pueblo llegó a haber 22 molinos. El más antiguo databa del siglo XVII.

Cascada en Rastoke. Foto: Miroslav Vajdic

El agua pasa por debajo de muchas casas, que han sido construidas siguiendo una misma forma arquitectónica tradicional: su base está formada por pilares de piedra, mientras que los tejados son de pizarra y madera.

Desde los alrededores de Rastoke es posible divisar parte del recorrido de los ríos, aunque para ver con detalle las cascadas y acceder al interior del pueblo es necesario pagar entrada. En 2019 el precio es de 30 kunas (aproximadamente 4 euros).

Vista de Rastoke

La Guerra de Croacia de los años 90 del siglo XX afectó mucho a esta región.
Aunque los molinos se salvaron de los ataques, muchas de las casas de Rastoke fueron destruidas. Al finalizar la contienda, en 1995, el gobierno croata llevó a cabo un plan de restauración que permitió recuperar con éxito el aspecto original del pueblo.

Desde 1969 Rastoke está protegido como monumento cultural croata.

Excursiones a Rastoke